Palacio y jardines de Gunnebo

Construido a finales del siglo XVIII como residencia de verano para John Hall, uno de los hombres más ricos de Gotemburgo en aquella época, el Palacio de Gunnebo es hoy en día un gran ejemplo de arquitectura neoclásica gracias a su impresionante diseño y decoración. Contempla el interior de esta casa tan bien conservada durante una de las visitas guiadas, pasea por los hermosos jardines de la finca o disfruta de una comida orgánica y un tradicional "fika" sueco.

¿Sabías que...?

• El Palacio de Gunnebo fue diseñado por el arquitecto Carl Wilhelm Carlberg
• Carlberg se embarcó en un gran viaje por toda Europa para inspirarse antes de empezar a trabajar en esta famosa residencia.
• Carlberg quedó muy impresionado por el trabajo del arquitecto renacentista Andrea Palladio, que era todo un maestro de los edificios simétricos, lo que influyó en sus diseños del Palacio de Gunnebo.
• John Hall dirigía uno de los mayores negocios comerciales de Gotemburgo, especializado en madera, vigas de hierro y aceite para trenes.
• Por desgracia, tras su construcción durante 20 años, John Hall solo disfrutó de la casa unos pocos años antes de fallecer.
• El rey Gustavo III de Suecia y María Teresa de Francia visitaron a John Hall y su familia en Gunnebo.
• El presidente estadounidense George W. Bush visitó Gunnebo en 2001 con motivo de la cumbre de la UE en Gotemburgo.

El Palacio y Jardín de Gunnebo es una de las atracciones turísticas más hermosas de Gotemburgo. La elegante casa neoclásica es una de las mejores de su estilo en el país y no es de extrañar, ya que su construcción duró 20 años. El arquitecto Carlberg pasó cinco años recorriendo Europa para reunir los conocimientos y la inspiración adecuados antes de dibujar los planos de la casa y la finca. Sin duda, después de tu visita estarás de acuerdo en que hizo un trabajo maravilloso.

Los visitantes de la finca pueden disfrutar de la arquitectura y el diseño del siglo XVIII de la propia casa, así como de los jardines barrocos formales del sur y de sus huertos, llenos de coloridas verduras y flores.

Participa en una visita guiada gratuita a la casa y apréndelo todo sobre la familia Hall, su apogeo e historia, y el fascinante legado que dejaron en Gotemburgo y que se extiende hasta la actualidad.

Combina tu visita con un "fika" sueco orgánico o un almuerzo en la cafetería, que cuenta con su propia y galardonada panadería. La comida que se sirve en Gunnebo se suele cultivar en los huertos que hay en el exterior.