En Miami llueve todos los días durante la época del verano, sobre todo entre junio y septiembre; son aguaceros tropicales que llegan puntualmente por la tarde y pasan rápido dejando los cielos pintados de nubes, listos para un atardecer espectacular.
Además, también puede llegar a hacer demasiado calor durante los mismos meses. Las medias máximas oscilan entre los 33 °C y los 34 °C, y tal vez esta cifra no te impresione, pero es porque no estás tomando en cuenta la humedad. ¿Has estado en una sauna de vapor? Pues hazte cuenta de que así se siente un día de verano caluroso en Miami.
Entonces, si vas durante los meses de verano, puede que en tu viaje a Miami necesites escapar de la lluvia o del calor, y por eso hemos recopilado aquí varias actividades en interiores —y otras en exteriores, pero al lado del agua.
La otra manera de soportarlo es, por supuesto, en la playa o la piscina de un hotel. ¡No olvides mantenerte hidratado!
Recorre la ciudad: Big Bus y Duck Tours
Con calor y lluvia, caminar tal vez no sea la mejor manera de recorrer Miami. Pero sobre todo si es tu primera vez, querrás hacerte una idea general de la ciudad, y entonces la solución es subirte a un autobús turístico hop-on hop-off y pasearte por sus calles desde el confort del aire acondicionado (también puedes subir al segundo piso al descubierto para respirar la brisa de Miami cuando se te antoje).
Otra opción es apuntarte a un Duck Tour más enfocado en el distrito art déco de South Beach en un vehículo anfibio que después de recorrer las avenidas del barrio más bonito de Miami te llevará a ver la ciudad desde el agua.
Con niños: Museo Infantil y Miami Seaquarium
Estos dos lugares son un hit entre los más chiquitos, pero también son divertidos para los adultos, así que todos contentos (y secos). El Museo Infantil de Miami consta de 14 exhibiciones interactivas donde los niños pueden construir edificios, componer música, soñar en un castillos de dos pisos hecho de arena, y dar rienda suelta a su imaginación en muchos otros espacios desarrollados especialmente para ellos.
Por otro lado, en el Miami Seaquarium hay varios acuarios interiores para explorar en caso de lluvia, y un montón de experiencias interactivas con animales marinos en el exterior, todas ellas obviamente muy cerca o en la refrescante agua. Podrán nadar con delfines y focas, tocar pingüinos y mantarrayas, y aprender sobre el trabajo de conservación que se lleva a cabo en este parque.
Sin niños: Museo de Arte Pérez y ARTECHOUSE
El Pérez Art Museum Miami, conocido como PAMM, tiene una colección muy amplia que acoge arte de casi todo el mundo, con un especial énfasis en artistas latinos y cubanos. Esta institución ha tenido varias etapas: se inauguró en 1984 como Center of Fine Arts, para después transformarse en 1996 en el Miami Art Museum, hasta que en 2013 se volvió a renovar, adquiriendo su nombre actual y cambiando de ubicación. Siguiendo la tendencia actual de albergar colecciones de arte en contenedores a veces más impresionantes que el contenido, la sede más reciente del PAMM fue construida por los arquitectos suizos Herzog & de Meuron (quienes también diseñaron el impresionante estacionamiento sin fachada en 1111 Lincoln Road, Miami Beach; ve a verlo).
Dedicado a la intersección entre ciencia, arte y tecnología, ARTECHOUSE Miami es un lugar para experimentar las nuevas formas de arte inmersivas de un futuro que cada vez es más presente. Luces, sonidos y espacios que cambian y reaccionan con la interacción del público hacen que más que un espectador, aquí te transformes en partícipe de la obra de arte.
La Venetian Pool en Coral Gables, y el Antiguo Monasterio Español
La Venetian Pool, una alberca de agua natural que se mantiene a 25 °C durante todo el año, es un lugar muy popular en verano. Ubicada en la ciudad de Coral Gables (a 25 minutos en coche desde Downtown Miami), esta alberca grandiosa fue construida en 1923, y es una oda al retro tropical, con cascadas, grutas y edificios de aspecto antiguo. El agua es dulce, proveniente de profundas pozas subterráneas, pero, eso sí, está fresquita y es ideal para un día sofocante. Ve entre semana para disfrutar del lugar a tus anchas.
Otro lugar que se nos ocurre para encontrar un poco de frescor son los gruesos muros de piedra del Antiguo Monasterio Español, en North Miami Beach. Algo que nunca te esperarías encontrar en esta ciudad, pero ahí está: un monasterio español de más de 900 años, trasplantado en el siglo XX a esta parte del mundo después de varias vicisitudes, como por ejemplo haberse quedado durante 26 años en un almacén de Brooklyn en cajas, un rompecabezas esperando a ser reconstruido.
Checa las páginas de ambos lugares para ver los horarios de apertura. El monasterio se renta para eventos como bodas, y por ese motivo cierran al público con bastante regularidad.
Un paseo en barco (o en lancha motora super veloz)
¿Se acuerdan de Miami Vice? Si tienen hijos adolescentes, lo más seguro es que sí recuerden a Sonny y a Rico volando sobre la superficie del mar en una lancha motora, persiguiendo a algún tipo peligroso. Los recuerdes o no: ahora que estás en Miami, aprovecha la oportunidad para vivir la emoción de ir a toda velocidad sobre el mar en un exhilarante paseo de 45 minutos en lancha motora (con algunos momentos de descanso para contemplar Miami desde la distancia).
Otra opción para conocer la fisionomía de la ciudad de manera general es hacer un tour en barco. Miami es una ciudad con una geografía muy especial, situada en una bahía (la Vizcaína) con cientos de islas-barrera que la protegen. Los tours en barco son muy populares, ya que te permiten ver el impresionante perfil de la ciudad desde la distancia, y pasar muy cerca de las “casas de los millonarios” en la famosa Millionaire’s Row.
Ahorra en tu viaje a Miami (llueva o haga sol)
Sabemos que viajar no es barato, pero en Go City tenemos una solución para que ahorres y aproveches tu estancia al máximo. Las entradas a varias de las experiencias que hemos mencionado arriba, y muchas más, están disponibles con cualquiera de los dos pases para Miami de Go City®. Elige sobre la marcha entre las principales atracciones de la ciudad y ahorra hasta un 55% en los costos combinados de la admisión frente al pago en la puerta.
Por último, una heladería para que te refresques aún más: Dasher & Crank, en el barrio de Wynwood, donde están los famosos murales de Wynwood Outer Walls. Son los mejores helados que has probado en tu vida; tómate uno a nuestra salud.