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Lo mejor de visitar Cancún en junio es que habrá menos gente en las atracciones y playas, ya que aún no hay vacaciones escolares y porque se trata de uno de los dos meses más húmedos y calurosos del año, y por consiguiente, tendrás muy buenas ofertas en alojamiento y vuelos.
Aunque no te preocupe demasiado el ocasional chubasco, es bueno saber que las lluvias en esta región no caen a diario, y que pasan rápido. De todas formas, con las temperaturas elevadas del verano, casi agradecerás las nubes (y tendrás espectaculares atardeceres para tus fotos).
Todos los atractivos de Cancún y alrededores siguen abiertos, por supuesto, y esperándote.
Mantente fresco al lado del agua...
Si te inquieta la idea de pasar toda la semana en el mismo lugar en la playa junto a tu hotel, despreocúpate, porque en Cancún encontrarás todo tipo de actividades para cambiar de escena, pero sin alejarte demasiado del agua.
Pasa un buen rato de diversión y emociones fuertes en el Ventura Park, el clásico parque de atracciones acuáticas con toboganes, tirolesas y un área para niños pequeños; o prueba tu habilidad manejando una moto acuática a toda velocidad por la laguna Nichupté.
Y si quieres darle un toque romántico a la vida marina, escápate en un barco durante unas horas al atardecer o por la noche para disfrutar de una cena y una velada inolvidable flotando sobre el mar.
...y debajo del agua
Uno de los mayores atractivos en Cancún se extiende a lo largo de más de 1,000 kilómetros por las costas de cuatro países diferentes: es el Sistema Arrecifal Mesoamericano, más glamurosamente conocido como el Gran Arrecife Maya, hogar de infinidad de especies de plantas y animales, e íntimamente conectado con los sistemas fluviales que desembocan sus aguas en el mar Caribe.
La única manera de comprender la indescriptible belleza que se mueve bajo el agua es buceando o haciendo snorkel, una actividad que aquí puedes practicar durante horas sin congelarte de frío y sin que se repita nunca la misma escena.
Para bucear en este arrecife protegido es muy aconsejable hacerlo como parte de una excursión organizada que te llevará a los lugares donde está permitido, con guías profesionales que conocen bien la zona. Algunos operadores de excursiones por la selva o paseos en barco incluyen una parada para snorkelear, proporcionando el equipo necesario y las instrucciones para quienes nunca lo han probado antes.
Otras excursiones se centran en esta actividad visitando tres o cuatro diferentes lugares para explorar el arrecife. Escoge cómo hacerlo, pero no dejes pasar la oportunidad de mirar lo que sucede en el arrecife con tus propios ojos.
Cenotes y pirámides en la selva
Tal vez el calor húmedo no sea el mejor clima para hacer una visita a un enorme sitio arqueológico, pero si no quieres irte de aquí sin visitar una antigua ciudad maya, ve a Tulum, ya que se encuentra sobre la playa. Y así puedes refrescarte en el mar en medio de tu visita.
Es una ciudad pequeña, rodeada de la selva y el mar y habitada por una nutrida población de iguanas. Tulum fue una de las últimas ciudades que construyeron los mayas yucatecos antes de la llegada de los españoles, y también una de las últimas en ser abandonada.
Por eso se encuentra en mejor estado de conservación que otros sitios arqueológicos. Pide a tu guía que te cuente la historia del faro. Si vienes por tu cuenta (la entrada es muy económica), puedes aprovechar la excursión y visitar alguno de los numerosos cenotes que se encuentran cerca del sitio, o ir a comer en la playa a la zona de hoteles en Tulum.
Saborea la cultura mexicana
Aunque gran parte de las actividades en Cancún se centren en la playa y la selva, no hay que olvidar que este destino es parte de un enorme país con una cultura sofisticada y una historia milenaria.
Para una introducción a la cultura gastronómica mexicana, puedes hacer un tour de tacos por el centro de Cancún y dejarte llevar por la explosión de la comida callejera, pero ten cuidado con las salsas, y nunca, nunca te fíes cuando un mexicano te diga: “esta salsa no pica”.
También puedes pasar una tarde-noche en Xoximilco, un parque temático/fiesta flotante que hace honor al lago de Xochimilco de la Ciudad de México. Como en este último, aquí los visitantes pasean por los canales de la laguna en trajineras, unos barcos de fondo plano que acomodan una larga mesa en medio, mientras degustan comida típica de diferentes regiones del país y disfrutan de la música en vivo de mariachis, tríos y marimbas. Prepárate para cantar “Pero sigo siendo el rey” a pleno pulmón, y tráete tu lista de rancheras para hacer tus peticiones especiales.
Atracciones para tardes de lluvia y calor
Si de pronto el tiempo no acompaña para los planes al aire libre, Cancún ofrece una amplia gama de actividades que hacer al resguardo de la lluvia y el calor.
En la Gran Rueda Cancún podrás disfrutar de unas vistas panorámicas fantásticas dentro de la comodidad de sus pods climatizados. Ve a la hora mágica del atardecer para tomar fotos espectaculares de la cuidad y el mar Caribe.
Otra gran opción es visitar el Museo Maya de Cancún, con una importante colección de artefactos que en gran medida provienen de los sitios arqueológicos vecinos. El edificio del museo es muy bonito, moderno, y se recorre muy bien en una tarde. Además, en las mismas premisas está el pequeño –pero no menos interesante– sitio arqueológico de San Miguelito.
¿Quieres ahorrar en Cancún en junio?
Consulta en nuestra página cuál de nuestros dos pases te funciona mejor, ya sea el Pase Explorer o el Pase Todo Incluido; con cualquiera de los dos te aseguramos que ahorrarás en las entradas para las actividades que prefieras hacer durante tu estancia en este paraíso tropical. Aunque sea época de lluvia, tendrás días enteros de sol y calor para disfrutar de las actividades al aire libre, y con mucha menos gente a tu alrededor.
