Qué hacer en 2 días en Roma

¿Tienes dos días para visitar Roma? No entres en pánico. Ok, tal vez dos días no son suficientes para volverse romano. Tampoco te va a dar tiempo a ver todos los grandes monumentos de Roma, ni a pasear por los caminos menos trillados y admirar las joyas escondidas en cada barrio de esta fabulosa ciudad desde donde se expandió un imperio del que todavía hoy en día sentimos la influencia.

El truco para aprovechar al máximo dos días en Roma es planear con antelación, es decir, escoger qué quieres ver antes de llegar, especialmente si viajas acompañado, ya que así evitarás perder tiempo en decidir.

A continuación, para hacerte la vida más fácil, te proponemos un itinerario con varias alternativas para cada día. Muchas de las entradas a los monumentos, tours y servicios que reseñamos aquí vienen incluidas en el Pase Explorer de Go City. Con nuestro pase, ahorrarás dinero, y aprovecharás al máximo tu tiempo.

Día 1 – Big Bus – Los principales de Roma

Image of Person,

Por suerte, las grandes atracciones de Roma se encuentran muy cerca unas de otras. El centro de la ciudad es compacto y está llenísimo de tesoros de la antigüedad y de todas las épocas que han ido dejando su rastro en las calles adoquinadas y plazas romanas.

Dirígete a la estación Termini y espera al autobús turístico Big Bus o el City Sightseeing Rome (las dos compañías operan la misma ruta y tu Pase Explorer te da acceso a ambos autobuses).

El servicio funciona desde las 9 de la mañana hasta las 6:30 de la tarde, y puedes bajar y subir en cualquiera de las paradas durante todo el día. Los autobuses pasan cada 10-15 minutos, y la ruta entera se completa en poco menos de dos horas. Por ejemplo, podrías darte la vuelta completa y después seguir utilizando el servicio como transporte para ir de un sitio de interés a otro.

Una opción para este primer día son los sitios arqueológicos más famosos del mundo: el Coliseo, la Colina Palatina, el Circo Máximo, el Foro, y por supuesto el Panteón. Puedes hacer un tour a tu propio ritmo con una audioguía que te llevará por el Coliseo, el Foro y la Colina Palatina y que te llevará aproximadamente dos horas.

Image of Outdoors, Person, Graveyard, Plant,

Después de tanta ruina, tal vez tengas ganas de pasear por algún parque y sentir la vida contemporánea de la ciudad. Te sugerimos ir directamente al parque más popular de Roma, el de Villa Panphili, y llevarte un picnic para merendar allí mismo. Si quieres unas vistas de la ciudad para tomar fotos, dirígete ya sea al Jardín de los Naranjos o al mirador del Gianicolo, ambos en la colina Janiculum, donde también se ubica el precioso Jardín Botánico (si vas en primavera, no te lo pierdas).

Para tomar algo por la noche y tal vez escuchar algo de música en directo, ve al barrio del Trastevere, donde se concentran los bares de moda de la ciudad. Para comer, te recomendamos Le Mani in Pasta para la pasta, Ai Marmi para las pizzas o Nanarella para las especialidades romanas. En cuanto a bares, prueba el San Calisto, uno de los más antiguos del barrio, el Babylon, con su impresionante colección de cócteles, o la Enoteca Ferrara, con una magnífica carta de vinos italianos.

Día 2 – El Vaticano – Los Museos Capitolinos – Tours guiados

Image of Grass, Summer, Building, Dome, Tree, Lawn, Palm Tree, Garden, Nature, Outdoors,

Ya sabemos que no te va a dar tiempo a verlo todo, pero todavía tienes un día, y un día tiene muchas horas.

Tal vez quieras visitar el Vaticano. Mucha gente viene a Roma solo para visitar el corazón palpitante del catolicismo, y no necesitas ser católico para apreciar la grandiosa arquitectura y las maravillas del arte que hay aquí. El país más pequeño del mundo tanto en territorio (menos de 50 kilómetros cuadrados) como en habitantes (unos 800) guarda una cantidad de tesoros impresionante, empezando por la gran obra maestra de Michelangelo, la Capilla Sixtina.

Alrededor del Vaticano tienes muchas opciones para comer y seguir con tu día.

Image of City, Road, Street, Urban, Lamp, Person, Neighborhood, Alley, Shoe, Backpack, Bag, Car, Vehicle, Handbag, Motorcycle,

Para la tarde te proponemos varias opciones de paseos guiados por guías expertos (ojo: algunos de estos tours solo se dan en inglés). Puedes escoger entre el barrio del Trastevere, o el interesantísimo barrio judío de Roma, una de las comunidades más antiguas de judíos en el mundo.

O, si quieres seguir con el tema cristiano y no sufres claustrofobia, haz el tour de las catacumbas de Roma. Se encuentran en el Parque Regional de la Antigua Vía Apia, un espacio verde rodeado de calzadas romanas, con antiguos restos de villas y termas, y las famosas Catacumbas de San Calixto. Ten en cuenta que solo se hacen dos tours al día, el de la mañana de 9:30 a 12 horas, y el de la tarde (que es el que te proponemos), de 14 a 17 horas.

Image of Baby, Person, Adult, Male, Man,

Otra opción para tu segundo día son los Museos Capitolinos, en el mero centro de Roma. Aquí tienes tres palacios dedicados al arte antiguo (lo más “moderno” que te puedes encontrar es tal vez a Caravaggio y a Rubens). Rinde pleitesía a la famosa estatua de bronce que representa a la loba amamantando a Rómulo y Remo, y después aprovecha el resto del día para caminar por las laberínticas calles de Roma y descubrir la ciudad a tu ritmo por unas horas.

Si de pronto te encuentras en la Piazza di Sant’Eustachio, busca el café del mismo nombre y tómate un espresso a nuestra salud. Si te gusta mucho, te puedes llevar una lata de café para moler en casa. Nos lo vas a agradecer.

Algunos consejos generales para viajar a Roma

  • Reserva las entradas a las atracciones más populares como el Coliseo o los Museos Vaticanos con mucha antelación. Sobre todo, si viajas con tiempo limitado, es mejor reservar las entradas en línea (o adquirir el Pase Explorer de Go City).
  • Si vas en verano: ve a visitar los sitios arqueológicos que están a la intemperie lo más temprano que puedas. Lleva ropa ligera y cómoda, sombrero, lentes para el sol, sombrero, crema de protección solar, y un sombrero. ¿Ya lo entendiste? Vas a necesitar un sombrero. ¡Aprovecha para conocer las catacumbas! La temperatura es deliciosa bajo tierra.
  • Trae tu botella de agua reusable, no importa la estación. En Roma el agua de la llave (el grifo) es potable y de alta calidad. Además, la ciudad dispone de muchas fuentes de agua, algunas muy hermosas y antiguas; se llaman “nasoni” (narizones). Puedes bajarte una aplicación para encontrarlas o consultar la ubicación de las fuentes en una página web. ¡Hay una dentro del Foro!
  • Es una ciudad muy densa, ruidosa, y la fama de su tráfico infernal no es una leyenda. Hay que hacer como los romanos, y tomárselo con serenidad y buen humor. Pero si eres de los que cualquier ruidito te quita el sueño, te sugerimos no olvidarte de tus tapones para los oídos. Pueden salvarte la noche.
  • Lleva zapatos súper cómodos, unos que ya hayas usado y comprobado que funcionan bien. Muchas calles de Roma son de adoquines, así que olvídate de los tacones.
  • ¡Usa el transporte público! Haz un plan que incluya un viaje en metro o autobús. Es la mejor forma de cubrir largas distancias en la ciudad, y además así convives con los romanos y su vida cotidiana.
  • Por último, en el Vaticano y en muchas iglesias de la ciudad que siguen en funcionamiento, hay que respetar el código de vestimenta. No se permiten faldas ni pantalones cortos, ni gorras, ni hombros descubiertos. Así que en caso de que viajes en primavera o verano, lleva un chal ligero en el bolso para cubrirte cuando lo necesites.

En resumen...

Dos días Roma es más que suficiente para hacer un poco de turismo y visitar los grandes hits de la ciudad, conocer un par de barrios, comer delicioso, e incluso disfrutar de la vida nocturna romana.

Planea bien tu viaje, no seas demasiado ambicioso, y no olvides dejar algo de tiempo para callejear, perderte e improvisar.

Para aprovechar tu tiempo al máximo y ahorrar en las entradas a las principales atracciones de Roma, considera adquirir el Pase Explorer de Go City. ¡Dos días en Roma no tienen por qué salir tan caros! Además, si echaste tus moneditas en la fuente, no te quedará más remedio que regresar.

Anna Rivero
Experto/a de viajes de Go City®

Seguir leyendo

Blog

Planes curiosos y originales en Roma

Roma es un auténtico paraíso turístico, con atracciones mundialmente famosas como el Coliseo, el Foro Romano, el Panteón o la Fontana di Trevi, pero la cosa no queda ahí. Si a ti lo que te gusta es adentrarte en los caminos menos transitados, en Roma también encontrarás todo tipo de actividades curiosas y planes extravagantes. Desde barrios recónditos que parecen sacados de un cuento de hadas hasta murallas milenarias dentro de un McDonald's, la Ciudad Eterna tiene montones de cosas con las que sorprenderte. Si lo tuyo son los planes insólitos, la caza de anécdotas y la búsqueda de recuerdos originales, no te pierdas nuestra selección de planes originales y algo estrambóticos que hacer en Roma. Nuestra selección incluye: Barrios recónditos y fascinantes Cenar en un tranvía con jazz en directo Iglesias insólitas Descenso a las catacumbas ¡Y mucho más! Adéntrate en un cuento de hadas sin salir de Roma El diminuto Quartiere Coppedè, con sus agradables jardines, sus enormes fuentes y sus coloridas fachadas adornadas con gárgolas y frescos, es un barrio bastante desconocido y nada turístico. Lo cual no quiere decir que no merezca mucho la pena visitarlo. Pasea por sus tranquilas calles y sus silenciosas plazas para descubrir una fascinante mezcla de estilos arquitectónicos, que van desde la Antigüedad griega hasta el Art Nouveau, pasando por el gótico, el románico, el manierista y muchos más. Deambula por las calles de este barrio de ensueño y descubre torres florentinas, palacios barrocos y arcos moriscos. Una de las calles que no debes perderte es Via Tagliamento, donde descubrirás el Palazzo del Ragno (palacio de la araña), de inspiración asiria, famoso por la enorme lámpara de araña de hierro que cuelga del arco que forma parte de la fachada del palacio. Acércate también hasta la famosa Fuente de las Ranas, en este ambiente tan onírico, lo mismo te dejas llevar e intentas darle un beso a alguna a ver si se convierte en tu príncipe o princesa ideal. Una audiencia con el Papa en Roma No hace falta tener fe para asistir a las bendiciones y oraciones semanales del Pontífice en la Plaza de San Pedro o en el Auditorio Nervi del Vaticano. Solo tienes que ir con la mente abierta y dejarte llevar por el tono sereno y meditativo del Papa. No todos los días se puede ver de cerca a la máxima autoridad de una religión tan multitudinaria y, total, al Vaticano tienes que ir igualmente, porque no querrás perderte sus muchas joyas, como la Capilla Sixtina, por ejemplo. La entrada a la audiencia papal es gratuita, aunque también puedes adquirir un pase combinado con acceso a la Basílica de San Pedro, visita obligada en Roma. El Santo Padre suele dirigirse a la multitud los miércoles sobre las 9:30 de la mañana, siempre que se encuentre en la ciudad. Eso sí, es recomendable llegar temprano para conseguir buen sitio, porque se suele llenar. Deja que Roma te cale hasta los huesos Si lo que buscas son criptas llenas de calaveras e iglesias con reliquias antiguas, estás en la ciudad adecuada. Regálate una visita a las criptas de Santa Maria della Concezione, donde los restos mortales de unos 4000 frailes capuchinos decoran las paredes, como si fuera el resultado de una versión macabra de un episodio de Reformas para todos los bolsillos. Prepárate para contemplar la extraña cripta de pelvis y trata de no traumatizarte con el esqueleto del techo que empuña una guadaña (de huesos, por supuesto). Y si aún te queda estómago para continuar con el festival de huesos, no te pierdas la iglesia de San Silvestro in Capite, donde se expone un cráneo que pretende ser la cabeza decapitada de San Juan el Bautista . O si viajas en pareja y os gusta darle un toque macabro a vuestros planes románticos (para gustos están los colores, ¿no?), solo tenéis que visitar la Basílica de Santa Maria in Cosmedin, donde podréis contemplar de cerca nada menos que el cráneo de San Valentín adornado con guirnaldas de flores. Vistas peculiares de la Basílica de San Pedro De todas las fotos de Instagram de la Basílica de San Pedro que se pueden tomar desde distintos puntos de Roma, el ojo de la cerradura del Aventino es posiblemente la más peculiar. Tendrás que hacer cola para esperar tu turno, porque se ha corrido la voz, pero la espera merece la pena, ya verás. Colócate bien cuando llegue tu turno y verá cómo el ojo de la cerradura sirve de marco perfecto a la basílica, flanqueada por los setos perfectamente cuidados del jardín de la Villa dei Cavalieri. Otra ilusión óptica que suele desconcertar a quienes la ven es la que tiene lugar en Via Niccolò Piccolomini, al pasear desde el otro extremo de la frondosa avenida hacia San Pedro. La cúpula de la basílica, de aspecto imponente en un principio, parece disminuir de tamaño a medida que nos acercamos. Resulta bastante desconcertante, sobre todo si haces el trayecto a gran velocidad. Como, por ejemplo, en una vespa. ¿Vas a querer patatas y bebida con tu muralla milenaria? Estarás pensando que con toda la deliciosa pasta y las exquisitas pizzas que te esperan en Roma, nos hemos vuelto totalmente tarumbas si pretendemos recomendarte un Big Mac. Pero no es precisamente la comida lo que nos interesa en el McDonald's del sótano de la estación Termini de Roma, sino los restos de las Murallas Servianas que se yerguen en plena hamburguesería. Estas imponentes murallas rodeaban la ciudad y servían de defensa contra las invasiones galas y cartagineses en la Roma del siglo IV a.C. Resulta un espectáculo bastante incongruente, contemplar unas ruinas romanas dentro de un McDonald's normal y corriente, pero ¡qué esperabas, esto es Roma! Si pretendes seguir una dieta estricta de pasta y pizza durante tu estancia en Roma y por, lo tanto, te niegas a pisar una sola hamburguesería (con ruinas romanas o sin ellas), no te preocupes, también hay restos de las murallas fuera de la estación de Termini. Visita una iglesia circular En una ciudad con unas mil iglesias repartidas por sus calles, como es Roma. Es evidente que además de las iglesias más clásicas y convencionales, alguna tiene que haber algo más peculiar que las demás. Santo Stefano Rotondo, por ejemplo, es la primera iglesia circular de Roma y data del siglo V d.C. Cruciforme por fuera, es en su interior donde las cosas se ponen realmente interesantes, con un gran espacio central circular repleto de columnas en formación circular y unos asombrosos frescos de los artistas del siglo XVI Niccolò Circignani y Antonio Tempesta que representan, con espantoso detalle, las macabras muertes de 34 mártires. La Bocca della Verità Si te fijas bien, descubrirás un personaje curioso en el pórtico de la basílica románica de Santa María in Cosmedin (la de los restos de San Valentín, ¿te acuerdas?). Un personaje que parece salido de la película de culto de los años 80 Dentro del laberinto, pero que es en realidad la famosa Bocca della Verità (Boca de la Verdad), una enorme máscara de mármol con unas propiedades muy particulares... Cuenta la leyenda que quienes hubieran mentido perderían los dedos al meter la mano en la boca de la máscara. Si, cuando la encuentres, te sientes especialmente valiente, puedes comprobar su eficacia en tus propias carnes (te recomendamos probar con tu mano menos buena, ¡por si las moscas!). Roma, territorio de gatos A pesar de lo que pueda parecer, los restos del antiguo Teatro de Pompeyo y los templos de la época de la República Romana que lo rodean no están deshabitados, de hecho, centenares de habitantes aún viven entre las ruinas: los famosos gatos romanos. Los encontrarás a sus anchas en los alrededores de la Piazza Largo di Torre Argentina. Deambulan entre las ruinas, se asoman tras las columnas y se cobijan a la sombra de los antiguos muros de piedra. Muchos de ellos son amistosos e interactúan con la gente que se les acercan de buena gana. En definitiva, un plan perfecto en roma si eres amante de los felinos. Turismo, cena en un tranvía de época y jazz en directo Si buscas planes extravagantes en Roma, es imposible que Tramjazz te decepcione. La combinación de jazz en directo, cena a la luz de las velas y turismo por Roma es difícil de superar. La aventura comienza cuando subes a bordo del Stanga 1947, un tranvía de época que recorre con calma las calles de Roma mientras tú disfrutas de una cena de tres platos a la luz de las velas, amenizada por la música en directo de la banda de jazz del tranvía. Esta experiencia única pasa por varias atracciones importantes, con el Coliseo y Villa Borghese. Definitivamente un plan muy diferente a las típicas visitas masificadas de los monumentos romanos. Ahorra en Roma con Go City® Ahora que ya conoces los mejores planes insólitos y originales en Roma, ¡tienes todo lo que necesitas para disfrutar de tu viaje! Bueno, casi todo. Aún te falta lo más importante: tu pase de Go City®. Un pase turístico que te permitirá ahorrar en las entradas para las principales atracciones y actividades de Roma. ¡No te lo pierdas!
Maria Ermitas Barrasa Rodriguez
Maria Ermitas Barrasa Rodriguez
Blog

Diez planes relajantes y tranquilos en Roma

La vida del turista es dura, lo sabemos por experiencia propia. Y Roma tiene suficientes monumentos, museos y restaurantes para mantener ocupado durante varios días al más ávido viajero. Pero ¿para qué sirven unas vacaciones si no es para relajarse? ¿dónde está la gracia de ir de un lado para otro todo el tiempo? Aléjate de las zonas turísticas más concurridas, con sus bulliciosas aglomeraciones y las bocinas de los coches a todo volumen, y descubrirás rápidamente otra cara de la Ciudad Eterna, la de las iglesias silenciosas, los picnics en la cima de las colinas y los paseos al atardecer. Sigue leyendo para descubrir nuestra selección de los 10 planes más tranquilos y relajantes que hacer en Roma... Visita el Giardino degli Aranci Este pequeño jardín es conocido entre los lugareños sobre todo por las naranjas amargas que crecen en sus árboles. Su nombre oficial es Parco Savello, pero todos los romanos lo llaman el Jardín de los naranjos. Cómprate algo dulce y un espresso para llevar, y dirígete a los bancos del parque, donde podrás ver pasar el mundo y disfrutar de los aromas cítricos del jardín. La fuente de la entrada está coronada por un rostro de mármol del siglo XVI, y la posición elevada del parque ofrece excelentes vistas de la ciudad. A un lado del jardín está la Piazza dei Cavalieri di Malta, donde una mirada a través del ojo de la cerradura de la puerta que conduce a la Villa dei Cavalieri revela la cúpula de la Basílica de San Pedro perfectamente enmarcada entre los setos del jardín. Cata de vinos Cuando estés en Roma, haz como los romanos: ¡bebe vino! Ya sea un barolo, un chianti o un valpolicella, en VinoRoma encontrarás variedades italianas interesantes y sabrosas. Sus sesiones de cata incluyen información sobre cómo se producen los vinos y los mejores acompañamientos gastronómicos para cada variedad, así como aperitivos tradicionales como los taralli (similares a los picos de pan españoles) y, por supuesto, el importantísimo trío de vinos. Además, el local está situado a tiro de piedra del Coliseo. Relájate en un spa Spa es un acrónimo del latín Salus per Aquam, lo que demuestra que los romanos prácticamente inventaron los balnearios, así que cuando se está en Roma... bueno, ya te haces una idea. Como era de esperar, en la ciudad abundan las opciones de bienestar. El QC Terme Roma es uno de los mejores: ubicado en una antigua casa de baños dentro de un yacimiento arqueológico romano, sus instalaciones terapéuticas incluyen una preciosa piscina termal al aire libre, cascadas revitalizantes, saunas, baños de sal e incluso piscinas con música subacuática. Presumiblemente, música chillout ambiental y nada de AC/DC. Hoteles de lujo como el Trilussa Palace y el Palazzo Montemartini prometen experiencias rejuvenecedoras similares. Ve a un concierto en una iglesia Roma posee algunas de las iglesias más bellas del planeta, la mayoría de ellas centenarias. Los conciertos son una magnífica manera de disfrutar de estos espacios sagrados, entre frescos medievales, vidrieras altísimas, antiguos objetos, estatuas doradas y, en ocasiones, reliquias extrañas. Ya sea un estruendoso recital de órgano, un coro dándolo todo, una orquesta clásica al completo o Los Tres Tenores, no hace falta ser religioso para vivir una experiencia realmente edificante. Paseo al atardecer El atardecer es el momento más romántico de Roma: el cielo se tiñe de naranjas, rosas, morados y rojos, y los monumentos más emblemáticos, como el Coliseo y la Fontana de Trevi, se iluminan con un estilo espectacular. Apúntate a tour a pie por algunas de los lugares más icónicos de Roma, desde la escalinata de la Plaza de España hasta el antiguo Panteón, magníficamente conservado. Tira una moneda en la Fontana de Trevi y pide un deseo, y saca fotos que te convertirán en la envidia de todos tus amigos de Instagram. Pero, sobre todo, relájate y disfruta este paseo en el que sólo te tienes que dejar llevar. Pasa el día en Villa Borghese Si quieres relajarse en Roma, lo mejor que puedes hacer es pasar un día explorando los encantos de Villa Borghese, uno de los parques más grandes de la ciudad. Un paseo por sus arbolados senderos revela impresionantes edificios y monumentos históricos, tranquilas fuentes y hectáreas de exuberantes jardines. Visita las numerosas grandes villas que salpican el recinto, incluida la que da nombre al parque y que ahora alberga la Galería Borghese, con su magnífica colección de obras de Rafael, Caravaggio, Tiziano y otros. Renta una barca para remar por el lago y contemplar de cerca el Templo de Esculapio, del siglo XVIII. O asiste a una obra de teatro en el Globe Theater, basado, por supuesto, en el teatro londinense de Shakespeare y con obras (principalmente) shakesperianas en su programación. Las obras son en italiano y la temporada del teatro va de finales de junio a principios de octubre. El café más relajante de Roma El bistró Romeow, en el barrio de Ostiense, destaca por dos razones principales: su conmovedor grupo de gatos y su simpático nombre, un juego de palabras entre “Roma” y “meow”, que es “miau” en inglés. La comida es excelente: en el restaurante ofrecen una selección de coloridos platos veganos italianos, mientras que el bistró es el lugar ideal para tomar un buen café y sabrosos pasteles caseros, acompañados del relajante sonido de varios gatos ronroneando. Con unos pasteles tan buenos que querrás pedir un segundo trozo y unos simpáticos gatitos como compañía, ¿qué puede no gustarte? Cena, monumentos, and all that jazz ¿Qué se obtiene cuando se combina el jazz en directo con una cena y un tour guiado? Nada más y nada menos que el TramJazz, una aventura musical única por las calles de Roma. Sube a bordo del Stanga 1947, un tranvía antiguo iluminado con velas que ahora es un restaurante rodante y una sala de conciertos que recorre los monumentos de la ciudad mientras tú cenas con el relajante sonido de fondo de una banda de jazz en directo. Al aperitivo le siguen tres platos, servidos mientras recorres poco a poco la metrópolis, con paradas en Villa Borghese y oportunidades fotográficas en el Coliseo y el Circo Máximo. Se trata de una experiencia única y casi onírica, tanto si eres un fan del jazz o no. Picnic en Monte Mario Justo fuera de los límites de la ciudad, y con unas vistas excepcionales de Roma, Monte Mario es la colina más alta de la ciudad, con 139 metros de altura. Por supuesto, la subida a la cima quizá no sea lo que tenías en mente cuando, buscando actividades relajantes y tranquilas en Roma, encontrarte este artículo, pero la paz y la relativa soledad que se respiran aquí arriba, junto con esas maravillosas vistas panorámicas bien merecen el esfuerzo. Llévate un picnic —burrata, pecorino, salami, y pan fresco para empezar, cannoli y una botella de barolo de postre— y túmbate sobre la hierba para dar un descanso a tus cuádriceps antes de emprender el viaje de vuelta. Un taller de pintura con comida y vino Este viaje a Roma puede ser el momento en el que por fin te atreves a tomar un pincel y explorar tu talento para la pintura. Si ya la practicas, sabrás que no hay nada más relajante que pasar un rato pintando, sobre todo si estás en buena compañía y puedes tomar unos vinos para desinhibirte y soltar la mano. Toma un taller de pintura en Roma para crear un recuerdo imborrable y, quién sabe, tal vez hasta una obra maestra. Hasta aquí nuestra lista de planes relajantes y tranquilos en Roma. Tenemos otro consejo más, y es que consideres el Pase Explorer de Go City en Roma, con el que podrás aprovechar al máximo tu tiempo y gastar lo mínimo en el costo combinado de las entradas a las atracciones principales de la Ciudad Eterna. ¡Cuéntanos cómo te fue en Instagram o Facebook, y síguenos para enterarte de nuestras promociones! (Tenemos otros pases en muchas otras ciudades del mundo. Con Go City, viajar es más fácil.)
Anna Rivero
Blog

Planes emocionantes en Roma (sólo para intrépidos)

Roma es una ciudad ideal para hacer turismo sin prisas, con muchos de sus monumentos antiguos más famosos a poca distancia unos de otros, como el Coliseo, el Foro Romano y el Panteón. También están la Fontana de Trevi, la Escalinata Española, el Vaticano y la Basílica de San Pedro. Cruceros relajados por el Tíber, románticos paseos entre naranjos perfumados al atardecer... Nos podríamos seguir así todo el artículo. En resumen, cuando piensas en Roma es más probable que te imagines contemplando en silencio los famosos frescos del Vaticano que, por ejemplo, haciendo paracaidismo sobre la ciudad o blandiendo una espada de gladiador. Pero si eso es lo que te va, Roma cuenta con un sorprendente número de actividades de alto octanaje para los amantes de las emociones fuertes y los que simplemente disfrutan saliendo de su zona de confort. Sigue leyendo para conocer nuestra selección de los planes más emocionantes que puedes hacer en Roma. Incluimos: Rafting en el Tíber Recorre Roma en Vespa Conviértete en gladiador Las catacumbas de Roma Salto en paracaídas Tour de fantasmas Clases de cocina Y alguna que otra más... Rafting en el Tíber Sí, lo has escuchado bien. El Tíber, ese río de leyenda, también tiene rápidos que pondrán a prueba tu habilidad de marinero. Bueno, al menos tu sangre fría y tu fuerza física. Contempla Roma desde un ángulo diferente mientras disfrutas de una experiencia de rafting única. Después de una sesión informativa sobre seguridad por parte de tus guías, donde aprenderás todos los comandos, técnicas y procedimientos importantes, estarás listo para embarcarte en tu aventura fluvial. La primera parte es suave y relajante, mientras desciendes tranquilamente por el río y te alejas del bullicio de la ciudad. Flotando por el corazón de Roma, verás el Castel Sant'Angelo, la cúpula de la Basílica de San Pedro y pasarás bajo una serie de espectaculares puentes antiguos y modernos. Al llegar a la Isla Tiberina, el recorrido te lleva por el brazo izquierdo del río (donde normalmente los barcos toman el derecho) para enfrentarte a los rápidos bajo el Puente Garibaldi y el Puente Fabricio. Terminarás la excursión pasando bajo el impresionante Ponte Rotto y atracando en el Porto di Ripa Grande. Recorre las calles en Vespa ¿Hay algo más romano que acelerar una Vespa —ese colorido icono del diseño industrial italiano— y recorrer las calles de la ciudad con un casco plateado? Es una forma estupenda de ir de un monumento a otro con estilo, atrayendo las miradas de admiración de los transeúntes mientras te paras a hacer fotos para Instagram en el Coliseo y la Plaza de España. Y, por supuesto, de ti mismo en tu nuevo juguete. Ten en cuenta que esta actividad es solo para conductores experimentados. Manejar una moto en el centro de Roma es francamente aterrador, así que solo los conductores de Vespa más seguros de sí mismos pueden hacerlo. Además, muchas de las calles están empedradas, lo que hace que la moto, y tú y quien sea que vaya contigo, vibren como gelatina. Consejo: también puedes ir en sidecar y dejar que un guía turístico profesional haga todo el trabajo duro por ti. Conviértete en gladiador Ponte tus mejores galas de gladiador, entra en la arena, levanta la espada y prepárate para enfrentarte a tu destino con el Gruppo Storico Roma en la antigua Vía Apia. Un grupo de entusiastas de la historia ofrecen clases de dos horas con las que te adentrarás en el noble arte del combate de gladiadores, haciendo realidad todas tus fantasías de Russell Crowe y Kirk Douglas. De mayo a septiembre, el lugar también acoge espectáculos nocturnos con actores ataviados con armaduras pesadas y armas reales, que se enfrentan cara a cara en (fingidos) combates mortales para entretenimiento de la multitud que aúlla (o sea, tú y tus amigos) en las gradas. También se ofrecen aperitivos, y las bebidas preferidas de los antiguos romanos. Desciende a las catacumbas de Roma Bajo el asfalto de Roma, una red de más de 50 antiguas catacumbas alberga los restos mortales de decenas de mártires cristianos e incluso de algunos papas de la temprana iglesia romana. Cinco de estas catacumbas están abiertas al público y puedes visitarlas con un guía. Allí verás frescos, esculturas y otros ejemplos del arte paleocristiano. Sentirás un escalofrío al descender por estos estrechos pasadizos, por lo que (en serio) no aconsejamos este tour a las personas nerviosas o claustrofóbicas. Sin embargo, para los intrépidos, la recompensa es inmensa. Surca los cielos A un mundo de distancia de los húmedos y oscuros túneles bajo las calles de la ciudad, esta actividad es estrictamente para los adictos a la adrenalina y fácilmente se clasifica como una de las actividades más extremas de Roma. Bueno, no estrictamente en Roma, ya que tendrás que salir de la ciudad, pero no muy lejos. Prepárate para dar un salto de fe a 1200 metros de altura. El paracaidismo en tándem es cada vez más popular en Roma, y hay varias empresas que organizan excursiones de un día precisamente con este fin. Sentirás una fuerte sensación de fatalidad inminente, seguida de un emocionante salto con vistas panorámicas de la costa y la ciudad de Roma (si puedes mantener los ojos abiertos). Los DVD y las fotos del salto suelen estar incluidos en el precio, para que te lleves un recuerdo inolvidable de su viaje (aunque creemos que nunca olvidarás este día). Un tour fantasmal Con casi 3000 años de violenta historia a sus espaldas, puedes estar seguro de que Roma tiene su buena dosis de espíritus inquietos, desde los crueles espectáculos del Coliseo hasta las escalofriantes catacumbas. Por esa misma razón, encontrarás docenas de tours nocturnos con guías expertos que te contarán historias legendarias de los lugares más embrujados de la Ciudad Eterna, como el espeluznante puente de Sant'Angelo y su castillo homónimo, en realidad un mausoleo donde se enterraron las cenizas de emperadores romanos de los siglos II y III. Aprende a cocinar como la nonna Ok, este no es estrictamente un plan extremo, pero si apenas sabes freír un huevo, seguramente te dará emoción. Por fin tienes la oportunidad de volver de tus vacaciones con nuevas habilidades culinarias para sorprender a tus amigos y familiares. Todo el mundo sabe que la cocina italiana es la mejor del mundo (con perdón, Francia, España, México, China, India, Japón, Perú...). Toma una clase de cocina italiana y aprende algunas de las técnicas clásicas italianas para preparar platos de pasta sencillos pero eficaces (¡nada menos que con tu propia pasta fresca hecha por ti!), o una pizza como las que hace la nonna. Cabalga veloz como el viento Imagínate la escena. Corre el año 143 d.C. y acabas de entrar en el Circo Máximo ante los rugidos de más de un cuarto de millón de espectadores. El emperador se impacienta y tú sólo tienes una oportunidad para ganarte su favor. Guía a tus fieles corceles hasta la línea de salida y prepárate para ponerte en modo Ben-Hur en una carrera de cuadrigas cargada de adrenalina por la arena. Ok, vale, no es real, pero esta experiencia de realidad virtual es lo suficientemente emocionante como para hacer que tu sangre fluya a toda velocidad. Todo lo que tienes que hacer es mantener la cabeza fría y los nervios de acero. Recorre Roma en Segway Probablemente no te hará ganar amigos entre los lugareños que se ven obligados a apartarse de su camino para esquivarle, pero un tour en Segway es una buena manera de recorrer la ciudad y ver sus lugares icónicos en un tiempo record (perfecto para los que vienen por dos o tres días). Hay docenas de operadores diferentes, pero un recorrido típico incluye monumentos imprescindibles como el Coliseo, el Foro, la Colina Capitolina y Villa Borghese. También hay recorridos nocturnos, así como la opción de visitar algunos de los barrios más interesantes de Roma como el moderno Trastevere, con sus animadas plazas y sus pizzas de primera clase. Sobrevuela el paisaje romano al amanecer Sobrevolar la campiña romana al amanecer en globo aerostático es una experiencia de ensueño para todos los seres de espíritu aventurero y romántico. Podrás contemplar a vista de pájaro pueblos medievales, colinas ondulantes y dorados campos de trigo mientras el sol se asoma por el horizonte, y tendrás la oportunidad de desayunar quesos y embutidos locales al final del vuelo. Si reservas un paquete de lujo te regalarán una copa de champán. Perfecto. Hasta aquí llegó nuestra lista de actividades emocionantes, extremas y aventureras que puedes hacer en Roma, pero no nos queremos ir sin un consejo más: considera el Pase Explorer de Go City cuando vayas a Roma. Con más de 40 atracciones y monumentos imprescindibles (estamos hablando del Coliseo, los museos del Vaticano o la Galería Borguese), tours guiados, experiencias culinarias y muchas otras actividades, el Pase Explorer te permite ver más por menos dinero y aprovechar al máximo tu viaje a la Ciudad Eterna. Síguenos en Facebook o Instagram para enterarte de nuestras ofertas y promociones, y ¡cuéntanos cómo te fue en tu viaje a Roma!
Anna Rivero

¡5% de descuento, porque sí!

Suscríbete a nuestra newsletter y recibe descuentos exclusivos, ideas de viaje y novedades sobre nuestros destinos.

Thick check Icon