Aunque a finales de mes empieza oficialmente la primavera en el hemisferio norte del planeta, no te confíes demasiado si vas a Roma en marzo. El tiempo es todavía fresquito, con temperaturas medias que rondan los 10 y 12o C. Junto con abril, marzo es uno de los meses más húmedos del año, así que también es probable que te llueva algún día.
Si esto no supone un problema para ti, vas a poder disfrutar de uno de los mejores meses de la temporada baja en la Ciudad Eterna. Los días ya son más largos, y por toda la ciudad verás las alegres flores amarillas de las mimosas, esos árboles que anuncian el fin del invierno en la región del Mediterráneo.
Así que sigue leyendo, y toma nota de nuestros consejos e ideas para pasar unos días estupendos en Roma en marzo. Hemos hecho una pequeña guía esencial de algunas de las principales atracciones de la ciudad, y al final del artículo encontrarás eventos especiales del mes de marzo. Andiamo!
Una primera mirada general
Para hacerte una idea de la ciudad en tu cabeza y comenzar a orientarte en su laberinto de calles, callejones y plazas, te sugerimos tomar el clásico autobús turístico y aprovechar las ventajas que ofrece este servicio que dura todo un día.
La ruta de este bus tiene paradas en algunos de los lugares más emblemáticos de la ciudad, así que además de darte una idea general de todo, también puedes escoger hacer una visita larga a uno de los monumentos o lugares obligados que tienes en tu lista, ya sea el Vaticano o los restos de la ciudad antigua.
Tras las huellas del Imperio
Repasa tus lecciones de historia (o tu colección de Asterix), porque aquí las podrás revivir visitando los grandes edificios que todavía se conservan de la época del Imperio Romano. ¡Prepárate para hacer un verdadero viaje en el tiempo y adéntrate en el glorioso pasado de la Urbe!
El más famoso edificio de toda Roma es sin duda el Coliseo, el gran circo construido a finales del siglo I, donde podían llegar a sentarse más de 50,000 espectadores en sus 80 filas de gradas a ver los sangrientos espectáculos de gladiadores y fieras, además de representaciones teatrales de batallas.
A tiro de piedra del Coliseo se encuentra el yacimiento arqueológico más importante de Roma, donde se pueden ver los restos del Foro Romano. Este era el centro político y religioso de la ciudad en la antigüedad: aquí se celebraban las bodas, las fiestas y otras celebraciones, y se anunciaban las últimas noticias políticas; también tuvo lugar aquí la cremación del emperador Julio César.
La colina sobre el Foro es el famoso monte Palatino: la leyenda cuenta que fue aquí, en una cueva, donde los gemelos Remo y Rómulo fueron criados por una loba. Aquí también construyeron sus casas los grandes personajes de la República Romana, y los emperadores durante la época imperial.
Haz una visita a los Museos Capitolinos para ver los objetos y esculturas que adornaban los edificios que acabas de ver y muchos otros tesoros que van desde la época etrusca hasta pinturas de Caravaggio.
El país más pequeño del mundo
Aprovecha que es temporada baja (al menos que tu viaje coincida con la Semana Santa, que algunos años empieza a finales de marzo) para visitar los tesoros del Vaticano, donde el lujo se gestiona muy bien desde los comienzos de la iglesia católica. Este pequeño estado soberano (el más pequeño del mundo), independiente desde 1929, concentra una de las fortunas más enormes del planeta, y una parte considerable está aquí materializada en sus colecciones de arte y sus magníficos edificios.
Seas católico o no, lo cierto es que no puedes irte de Roma sin pasear por los alrededores de la Santa Sede, quedarte sin aliento mirando la Capilla Sixtina de Miguel Ángel, y caminar por las magníficas galerías y salones de los Museos Vaticanos.
Aparta todo un día para recorrer este país de las maravillas, y si te cuadra con tus planes, te recomendamos hacer un tour guiado de la Basílica de San Pedro, para que no te pierdas ningún detalle de todos los tesoros que encierra (entre ellos, la Piedad de Miguel Ángel).
Ten en cuenta que es recomendable hacer planes para comer fuera del Vaticano, ya que las opciones dentro son limitadas.
Eventos especiales del mes de marzo
El mes empieza con una gran fiesta dedicada a las mujeres que en Italia se celebra desde 19, la Feste delle Donne. Las flores amarillas de la mimosa son el símbolo oficial de la celebración, y las verás por todos los lados. Solo tienes que agarrar una de algún árbol y portarla en tu ropa para mostrar apoyo por la causa de la igualdad entre hombres y mujeres.
A mediados de marzo (¿recuerdas los idus de marzo?) suceden varias cosas interesantes: una es el maratón de Roma, por si te quieres animar a correr pasando por los hitos de la ciudad en compañía de otros miles de deportistas. (Si buscas unos días tranquilos en Roma, evita venir en estas fechas, en las que además los hoteles se llenan.)
El día 15 se celebra una curiosa conmemoración del asesinato de Julio César en el sitio arqueológico donde sucedió el trágico evento. Los actores amateurs del Gruppo Storico Romano, una asociación de aficionados a la historia romana, recrean la escena del asesinato para el público que se reúne a su alrededor en el Largo di Torre Argentina (que es además el hogar de una gran colonia de gatos).
Otra más: el 19 de marzo, día de San José, en toda Italia se celebra el Día del Padre. No se hacen grandes festejos, pero por supuesto, hay un dulce especial para la ocasión, el zeppole di San Giuseppe, que en Roma se hacen con una masa frita (como de churro o buñuelo), rellenos de crema.
El tiempo en Roma en marzo
Marzo es un mes interesante para visitar Roma, ya que el clima comienza a mejorar y las multitudes de turistas son menos intensas que en los meses de verano. Durante el mes de marzo, la temperatura en Roma varía entre los 8°C y los 17°C en promedio. Si bien las temperaturas pueden ser frescas por las mañanas y por las noches, el clima generalmente es agradable y soleado durante el día.
En cuanto a las precipitaciones, marzo es un mes bastante lluvioso en Roma, por lo que es recomendable llevar un paraguas y ropa adecuada para la lluvia. Sin embargo, las lluvias no son tan frecuentes como en los meses de invierno, lo que permite a los visitantes disfrutar de la ciudad sin tener que preocuparse demasiado por el clima.
En pocas palabras, el tiempo en Roma en marzo es agradable y soleado durante el día, aunque puede ser fresco por las mañanas y por las noches. Es importante estar preparado para la lluvia, ya que marzo es un mes bastante lluvioso en Roma.
¿Qué ropa llevar a Roma en marzo?
En marzo, en Roma se pueden experimentar cambios en el clima, lo que puede hacer que sea difícil decidir qué ropa llevar. Se recomienda llevar ropa cómoda y ligera, como camisetas y pantalones, pero también es importante llevar ropa abrigada para las mañanas y noches frescas. Se puede llevar una chaqueta o un suéter ligero, así como un paraguas para las lluvias imprevistas.
También se pueden llevar zapatos cómodos y resistentes para caminar por las calles de la ciudad. Es importante tener en cuenta que, como hemos comentado, cuando cae en marzo la Semana Santa es un evento importante en Roma, por lo que es recomendable llevar ropa adecuada para visitar lugares religiosos, como una camiseta de manga larga o una blusa y pantalones largos.
Roma en marzo, un resumen:
Viaja a Roma en marzo y tendrás oportunidad de disfrutar algunos eventos que solo suceden durante este mes, y de todo lo que la ciudad ofrece los 364 días del año (pero sin tantas filas). No olvides tu paraguas ni tu abrigo, y explora la ciudad sin aglomeraciones masivas y aprovechando las ofertas de los últimos momentos de la temporada baja.
Si quieres ahorrar aún más, considera el pase Explorer de Go City para tu viaje romano. Con él podrás disfrutar de descuentos considerables en las entradas a los lugares más famosos de la ciudad, y tendrás acceso a otras experiencias y tours para completar tu itinerario (por ejemplo, un paseo en bicicleta por la Via Appia, o una experiencia de realidad virtual a las afueras del Coliseo).